domingo, 7 de octubre de 2018

Jugando con tus hijos pequeños a Eirendor - D&D 5e

Llevaba un tiempo queriendo iniciar a mís hijos en el mundo de los juegos de rol. Esta mañana de domingo por fin hemos jugado y nos lo hemos pasado genial.

Tengo una niña de 6 años y medio y un niño de 3 años y ocho meses. Creo que he acertado en el momento, porque habiendo empezado el chico el colegio (más la guardería del curso anterior), ya conoce los números del 1 al 9 y cual es mayor o menor. Eso, aunque seguramente no es imprescindible, creo que hace la experiencia más disfrutable.

En primer lugar, voy a definir un poco el contexto. Llevo un par de años que apenas juego 2 o 3 partidas anuales. Sin embargo, esta vez llevaba desde septiembre de 2017 sin hacer rodar los dados por circunstancias que ahora no vienen al caso. Pero durante muchos meses he ido mirando artículos y opiniones sobre jugar con niños. Estos enlaces son algunos de los que ahora mismo recuerdo mirar:

http://hackslashmaster.blogspot.com/2014/10/on-practical-guide-to-playing-d-with.html
https://offspring.lifehacker.com/how-to-introduce-your-kid-to-dungeons-dragons-1822920357
https://www.susanjmorris.com/dd-for-kids/
http://jovialpriest.blogspot.com/2012/07/kids-d-good-bad-and-ugly.html

Entrando en el asunto, mi objetivo era comenzar a jugar a rol, pero no a un "juego para niños" de rol. Quería una experiencia, lo más cercana al hobby, pero adaptada a los niños y más concretamente, a niños de la edad de mis hijos. Por lo que descarté todos esos juegos y fuí directamente a 5ª Edición de D&Ds. Sin embargo, aún eso era demasiado complicado, por lo que finalmente decidí que fuese Eirendor, un retroclon basado en la OGL de 5a, sin habilidades y bastante simplificado.

Mecánicamente solo realicé un cambio: la iniciativa. Últimamente estoy leyendo mucha OSR y me gusta mucho el concepto de Iniciativa de Grupo, así que estoy trabajando en unas reglas caseras sobre el tema. La aproximación que realicé con mís hijos es mucho más sencilla. Puede haber Sorpresa (de hecho fueron emboscados, eso no lo perdono ni en modo máster mamá), pero cuando comienzan los turnos normales, ellos juegan antes (primero mi hija y después su hermano, por edad es mejor así) y todos los demás después. Mucho más simple, no os preocupéis por los efectos en las reglas y demás, eso no le importa a unos niños que lo único que quieren es diversión.

Otra de mis premisas es que aunque haga de "máster mama", esto no iba a ser D&D de la Casa de la Pradera. Hay violencia y hay peligros. Los niños están sobreexpuestos a estas cosas hoy en día, no tiene sentido que vean dibujos donde hay mamporros y disparos (o jueguen a videojuegos donde "matan" bichos) y ahora queramos ser exquisitos jugando en mesa. Por lo menos esa es mí opinión, aunque no soy un experto, así que cada cual haga lo que estime oportuno con sus hijos, pero a mí no me gusta tenerlos en una burbuja de cristal. Lo que no quiere decir que haya que recrearse en sangre, vísceras o tortura. Si un enemigo muere, pues murió. Los prisioneros están encerrados y heridos, no tienes que explicarles que es la tortura y lo mucho que han sufrido, eso no toca ahora. No seamos extremistas, todo en su medida y sobretodo, adaptado a la edad de los niños.

Ayer por la noche nos dispusimos ha hacer las fichas, mi hija eligió una "princesa guerrera" y mi hijo un "mago malo" (que al día siguiente ya era bueno). Hicimos las tiradas, lo que sirvió para que practicasen con los números. Mí hija sabía al final del curso pasado sumar números pequeños y se ha olvidado, esto le sirvió para refrescarlo. Mi hijo no se equivocó ni una vez, y descartó el d6 más pequeño de todas las tiradas de atributo. Creo que esto es un punto a favor de estos juegos, no subestiméis a los niños, pueden jugar con juegos de adultos y les sirve en el plano pedagógico.

Pedazo de tiradas que se marcaron.
Con todo preparado, esta mañana después de desayunar, ya me estaban preguntando si iban a jugar. Elegí jugar la aventura para Sword & Wizardry EL MAL REPTANTE, amablemente traducida en su día por el Cabo Hicks. Es una aventura muy sencilla, pero a la par difícil, así que como solo eran dos jugadores, rebajé un poco las estadísticas de los monstruos equivalentes de Eirendor. La aventura va sobre rescatar a una familia que ha sido secuertada por un Ermitaño Loco que vive dentro de un árbol gigante en el bosque, dentro de él hay un Trepador Carroñero (Carroñero Tentaculado en Eirendor) al que adora como un dios y al que le ofrece sacrificios regularmente.

NOTA: Este último extremo es obviado por mis hijos puesto que son incapaces de entenderlo, ni era aconsejable introducirlo. Lo más maravilloso es que no hacen cuestionamientos sobre el tema, hay que rescatar a una familia y salvarlos de un monstruo, eso es con lo que se quedaron.

También usé la aldea de Nueva Faresia del Módulo "Contra la hermandad de la Muerte Silenciosa", a la que renombré como Rocacolmillo. Y el planteamiento fué de lo más clásico, simple y burdo por mi parte, y funcionó a las mil maravillas. Una princesa guerrera y su mago son invitados a un torneo en una aldea situada en la "frontera" del Reino (y no le puse nombre, "el Reino", no hubo preguntas de como se llamaba). La frontera es en medio de las "Tierras Salvajes", un lugar lleno de monstruos y peligros donde la gente del Reino va en busca de aventuras. Si, me hubiese gustado jugar a Keep on the Borderlands, pero con estas edades no creo que hubiese funcionado.

No voy a entrar en todos los detalles de la aventura:
- La princesa participó en el torneo de la justa a caballo y ganó (solo un combate).
- Los avisaron de la desaparición de la familia, fueron al bosque en su búsqueda y se perdieron.
- Encontraron al Ermitaño que les invitó a pasar la noche a "salvo de los peligros del bosque por la noche".
- Fueron emboscados por este y sus dos bestias. El lobo huyó y el ermitaño y su otra bestia murieron.
- Entraron en el árbol y encontraron la trampilla.
- Descendieron a rescatar a la madre y su hijo, tocaron la campana y apareció "el gusano".
- Lo derrotaron y decidí acabar con la partida narrando desde ese punto hasta que llegan al pueblo como héroes. Mi hijo ya hacia un rato que preguntaba (y con razón) que cuando terminábamos.

Con el Ermitaño y sus bestias derrotadas, se preparan para explorar el enorme arbol (el cubilete).


Fueron 2 horas de sesión, justo en el límite de lo recomendado.

Relatada mi experiencia, voy con mís consejos, no antes sin advertir que no soy pedagogo, solo un padre y lo que digo es solo en base a lo que he leído y a esta primera experiencia (y con mís hijos, no con otros niños).

- La duración, sin duda entre 90 y 120 minutos es lo máximo que deberías jugar seguido. En el caso de mi hijo de 3 años, 90 mucho mejor que 120. No puedes esperar mantener la atención y las ganas de jugar mucho más tiempo.

- Atrezzo: dale a tus hijos cosas "físicas". Mi hija no entendía que su personaje era la hoja, en cuanto le dí una miniatura, para ella, comenzó el juego. Además usé el mapa físico de Nueva Faresia (Rocacolmillo en el juego) y movian la miniatura por el mapa para escenificar donde iban. Adicionalmente le dí a mi hija un pequeño sable de luz Sith que era su "espada flámigera" y a mi hijo un palillo de comer del chino que era su "varita de curar heridas". Lo que nos lleva al siguiente punto.

- Dale objetos y facilidades para que se sientan especiales. Este no es un juego con tus amigos en el que tienes que ponerles las cosas difíciles. Dales objetos mágicos. La mágia es algo que suena maravilloso para ellos. Y asegurate que sean objetos que usarán.

- Son niños. No van a parar, no se estarán quietos, tendrás que llamarles la atención para que atiendan o no hagan juego paralelo. Respira hondo, si no están disfrutando te lo van a decir rápidamente. Así que si aún están alrededor de la mesa es porque les está gustando la experiencia.

- Se asquerosamente dirigista. Aquí no sirve el sandboxing, ni el interpretar ni nada. Ellos están aprendiendo algo nuevo y muchas veces van a necesitar que les dirijas. Deja que ellos elijan, pero si están 10 segundos y no saben que hacer, vete preguntando: ¿quieres hacer esto, aquello o prefieres lo otro?

- Es un juego, esto no es una obra de teatro (aunque hay adultos que creen que sí), olvida la interpretación, las actuaciones. Haz sonidos raros y divertidos. Olvida la verguenza. En el torneo de justas puse un lápiz y le dije a mi hija que era la valla. A continuación suena la trompeta (hice el ruidito y todo), sonido de cascos de caballo, y mientras ella movia su figurita como si estuviese cabalgando, yo hacia lo mismo (como si fuese un niño más) con la ficha del rival. Tirada de dados y narras el resultado. Y vuelta a empezar. Mi hija estaba muerta de risa. Diviértete como un chiquillo.

- Las reglas son aún menos importantes aquí que la diversión. El sistema usado en la partida fue muy simple, pero fuí yo quien me encargué de todos los detalles. No todas las cosas se hicieron como ponen las reglas, algunas por olvido y otras por conveniencia del momento. No importa. Ya habrá tiempo cuando sean mayores, dales diversión y déjales que tiren los dados (a los míos les encanta tirar dados, y ya saben diferenciar que es un d8 y un d20). En la partida no hubo movimiento en cuadrícula de combate, las minis se usaron para ver la posición en el combate y para darles a los niños algo "físico" en lo que centrarse.

- Se un máster mama. Si, rebajales el peligro. Yo ya iba con la idea de que "los heroes no mueren". Si perdian todos sus puntos de vida, pues pierden la partida, pero son rescatados para pelear otro día. No hace falta frustrarlos tan pronto con pérdidas de personajes. Si te parece que el Carroñero Tentaculado tiene demasiados PG, haz como yo y le pones la mitad.

- Pásalo bien. Todo esto lo haces para que tus hijos se diviertan CONTIGO. Mantén la Calma y Disfruta.


Espero que algo de lo que he contado aquí os sirva algún día.

Saludos.